¿Qué hacer para que las unidades de revalorización energética de los residuos sean más seguras?

Las unidades de revalorización energética de los residuos transforman los residuos domésticos en energía. Respetan el medio ambiente y se han pensado especialmente para que sean conformes con las normas europeas en materia de emisión de gas o contaminación acústica. Además, el agua utilizada en la fábrica siempre está en circuito continuo: es decir, no se tira nunca.

Estas unidades tratan los residuos domésticos de cerca de 1 millón de personas. Una parte de estos residuos se transforma en energía y el resto se recicla en revestimientos para carretera, por ejemplo. Pueden producir más de 200 millones de kvh, lo que representa el consumo medio de más de 50.000 hogares al año.

Unidades de revalorización energética: válvulas difíciles de manipular

El principio de la revalorización energética consiste en fabricar electricidad a partir del vapor producido por la combustión de los residuos gracias a un sistema horno/caldera.

Este proceso es complicado y sensible, las distintas etapas están separadas con válvulas desde la recepción de los residuos domésticos hasta su enterramiento. A veces dichas válvulas se solicitan mucho y otras veces poco. Debido a estas manipulaciones se pueden producir dos problemas:

• Problemas materiales para las válvulas que no se solicitan nunca: se rompen y muy a menudo deben reemplazarse.
• Problemas de salud para los operadores que manipulan continuamente las válvulas

Modec ha trabajado con los grandes actores de la revalorización energética de residuos para encontrar soluciones a estos dos problemas de accionamiento de válvulas:

• Mantener las válvulas poco solicitadas para evitar que se rompan
• Facilitar el accionamiento de las válvulas por parte de los operarios y, de este modo, proteger su integridad.

Unidades de revalorización energética: mantener las válvulas poco solicitadas para evitar que se rompan

Si las válvulas de las unidades de revalorización energética de los residuos se mantienen concienzudamente se pueden evitar accidentes graves, como las fugas de lixiviados [líquido residual que procede de la percolación del agua a través de un material]. ¡Una fuga de lixiviados de 30 m³ puede contaminar más de 2 toneladas de tierra!

Estas fugas se producen, en particular, cuando las válvulas poco utilizadas se han abierto de fuerza y rompen el sistema alrededor de la válvula, ocasionando grietas. Estos errores pueden evitarse fácilmente gracias a medidas simples y equipamientos eficientes:

• actualización de la instrucción técnica relativa a la gestión de las válvulas de la zona de retención;
• control diario del estado de las válvulas de la zona de retención añadido a la lista de verificación de los controles diarios que deben hacerse en la unidad de tratamiento de los lixiviados;
• recordar al conjunto del personal durante la reunión de explotación el papel que deben desempeñar y la gestión de las válvulas de las zonas de retención de toda la planta.

Modec intervino en el momento de establecer el control diario del buen funcionamiento de las válvulas. Gracias a nuestros aparatos de ayuda para la manipulación de válvulas móviles, este control pasa a ser fácil, rápido, seguro y sin esfuerzos para el operario. ¡Las válvulas se abren y se cierran en 30 segundos, la duración del control se divide por tres!

Facilitar el accionamiento de las válvulas por parte de los operadores

Cada unidad de revalorización energética de residuos puede tener varias decenas de válvulas, y muchas de ellas las accionan manualmente varias veces al día los operarios in situ para las necesidades de la producción. Estos operarios no sólo tienen como trabajo accionar estas válvulas. Esta es la razón por la que esta tarea debería facilitarse. Los actuadores de válvulas fijos no eran una solución ya que resultaban demasiado costosos en comparación con el número de válvulas que había en la planta. Por este motivo, el actuador de válvula móvil, fácil de transportar, de alimentar, sin riesgos de chispas, es la mejor solución.